
El legado de George Foreman (1949-2025): Adiós a una leyenda del boxeo
La comunidad deportiva internacional se encuentra de luto tras el fallecimiento de George Edward Foreman Sr., quien partió el viernes 21 de marzo de 2025 a los 76 años de edad. El icónico púgil estadounidense, dos veces campeón mundial de peso pesado, dejó este mundo rodeado de sus seres queridos, según confirmaron sus familiares mediante un comunicado oficial.
Una vida marcada por la superación y el éxito
Nacido el 10 de enero de 1949 en Marshall, Texas, Foreman trazó una trayectoria extraordinaria que trascendió las cuerdas del ring. Su carrera deportiva comenzó a brillar tempranamente cuando, con apenas 19 años, conquistó la medalla dorada en los Juegos Olímpicos de México 1968, hazaña que marcó el inicio de un recorrido excepcional en el boxeo profesional.
Su impresionante registro final de 76 victorias (68 por nocaut) y apenas 5 derrotas refleja la magnitud de un deportista que revolucionó la categoría de los pesos pesados con su potencia devastadora y técnica depurada. El único nocaut que sufrió en su carrera ocurrió precisamente en uno de los combates más emblemáticos de la historia del pugilismo.
Coronación y caída ante Muhammad Ali
Tras su debut profesional en 1969 frente a Donald Walheim, Foreman ascendió meteóricamente hasta consagrarse campeón mundial en 1973 al derrotar a Joe Frazier en Kingston, Jamaica. Esta victoria, que concluyó en el sexto asalto, consolidó su reputación como una fuerza implacable sobre el cuadrilátero.
Sin embargo, el punto de inflexión en su carrera llegaría en 1974, cuando protagonizó junto a Muhammad Ali el legendario «Rumble in the Jungle» en Kinshasa, entonces Zaire. Foreman, invicto y considerado favorito, sucumbió ante la estrategia maestra de Ali, quien lo noqueó en el octavo asalto. Esta confrontación, que trascendió el ámbito deportivo para convertirse en un fenómeno cultural global, marcó su primera derrota profesional.
En sus memorias, Foreman atribuyó este revés a circunstancias controvertidas, mencionando haber consumido agua con un sabor extraño proporcionada por su médico antes del combate. «No podía creer que había perdido el título mundial. Fue el momento más vergonzoso de mi vida. Pasé del orgullo a la lástima. Es devastador», confesaría posteriormente sobre este episodio.
Transformación personal y regreso triunfal
Tras abandonar temporalmente el boxeo en 1977, con apenas 28 años, Foreman experimentó una profunda transformación espiritual. Su conversión al cristianismo y posterior ordenación como ministro parecían haber puesto fin definitivo a su carrera deportiva.
Sin embargo, en 1987, con 38 años, «Big George» sorprendió al mundo con un retorno inesperado al cuadrilátero. Lejos de ser una mera anécdota, esta segunda etapa lo catapultó nuevamente a la élite mundial, demostrando que su talento y potencia permanecían intactos pese al paso del tiempo.
Aunque en 1991 perdió ante Evander Holyfield en su intento por recuperar la corona mundial, y en 1993 también fue derrotado por Tommy Morrison (actor de las películas de Rocky), Foreman alcanzó la gloria definitiva el 5 de noviembre de 1994. Aquella noche histórica en Las Vegas, noqueó a Michael Moorer para conquistar los títulos mundiales de la AMB y la FIB, convirtiéndose a los 45 años en el campeón de peso pesado más veterano de la historia.
El adiós definitivo
Foreman se retiró definitivamente en 1997 tras perder frente a Shannon Briggs en Atlantic City, Nueva Jersey. Su legado quedó inmortalizado con su inclusión entre los diez mejores boxeadores de peso pesado de todos los tiempos según la International Boxing Research Organization, reconocimiento que refleja su impacto indeleble en este deporte.
Reacciones ante su partida
La Asociación Mundial de Boxeo (AMB) expresó su pesar mediante un comunicado: «Lamentamos el fallecimiento de uno de los pesos pesados más grandes de todos los tiempos, el incomparable George Foreman. El mundo del boxeo está de luto, y desde la WBA queremos enviar nuestras condolencias a su familia y seres queridos».
Mike Tyson, otra leyenda del boxeo, se sumó a las condolencias: «Nuestro más sentido pésame a la familia de George Foreman. Su contribución al boxeo y al mundo del boxeo jamás será olvidada».
Por su parte, la familia destacó en su comunicado que Foreman no solo será recordado por sus logros deportivos: «Humanitario, olímpico y dos veces campeón mundial de peso pesado, fue profundamente respetado: una fuerza para el bien, un hombre de disciplina y convicción, y un protector de su legado, que luchó incansablemente por preservar su buen nombre para su familia».
El mundo deportivo despide así a un hombre cuya vida trascendió las cuerdas del ring para convertirse en símbolo de superación, fe y humildad.