Militantes Pro Trump irrumpen en el Capitolio de los Estados Unidos; 4 fallecidos en el asalto

Washington D.C. • Una convocatoria de partidarios del Presidente Trump se dieron cita en la capital de la nación el 6 de Enero, resultando en lo que solo se puede describir como un «asalto» a la democracia estadounidense después de que cientos irrumpieron violentamente en el Capitolio de los Estados Unidos.

En las primeras horas de la tarde, un grupo de gran numeración de los llamados «Trumpistas» abrumaron las fuerzas de seguridad del Capitolio, causando destrucción y caos en la famosa estructura y alcanzando entrar en ambas cámaras legislativas poco después de la policía facilitará la retirada de los legisladores.

Los manifestantes, muchos de ellos vestidos como tropas de asalto, lograron entrar al Capitolio mientras ambos cuerpos legislativos se disponían a votar para certificar las elecciones del 2020 en el que Joseph Robinette Biden sería declarado el ganador oficial y presunto presidente-electo.

Normalmente esta certificación es una mera formalidad, pero un número de legisladores republicanos aprovecharon para reafirmar la mentira de Trump de que las elecciones fueron robadas.

El Senador Joshua Hawley, Republicano de Missouri, emitió un reto al proceso de certificación y hace 2 días aseveró que resistiría el proceso y realizaría un llamado para investigar los resultados electorales que más de 60 veces han sido certificados por las cortes del país como válidas en representación de la voluntad popular.

Hawley cambio de tono en su retórica después de el asalto del miércoles que resultó en la muerte de por lo menos 4 personas. Detalles de los fallecidos o las circunstancias en que encontraron la muerte aún no se han dado a conocer por las autoridades en el Capitolio.

El Presidente Trump se ha resistido en reconocer la victoria de Biden y durante los últimos dos meses ha perpetuado la mentira de que las elecciones fueron manipuladas. Más que eso, el mandatario estadounidense, incitó a sus seguidores a dar cita en la Capital el miércoles en lo que se anticipaba como una jornada de protesta.

A pesar de las constantes pérdidas legales y la confirmación de varios recuentos electorales, Trump ha mantenido que el es el legítimo ganador de las elecciones creando una de las crisis constitucionales más profundas desde la guerra civil de 1861.

Cientos de manifestantes irrumpieron en el congreso vestidos con equipo militar, banderas y mochilas llenas de objetos contundentes. Las fuerzas de seguridad del capitolio se vieron obligados a retirarse y crear un circulo defensivo alrededor de las cámaras legistlativas del Senado y la Cámara de Representantes, dando una oportunidad para que los congresistas tomaran asilo.

Imagenes contundentes e inéditas circulan por la internet mostrando agentes con armas apuntando a los asaltantes. La policía del Capitolio confirma cuatro muertos entre los invasores.

Horas después del asalto, la Policía del Capitolio logró despojar a los asaltantes de la estructura y crear un perímetro alrededor del Capitolio con refuerzos de la Guardia Nacional.

Aunque no se ha detallado oficialmente la razón por la incursión, se teme que facciones del grupo asaltante pudieran haber buscado destruir las cajas con los certificados electorales, dicha acción hubiera sido calificado como un golpe de estado.

Durante varias horas, los asaltantes, cubiertos con banderas Trump y chalecos antibala saquearon las oficinas de los líderes congresionales, algunos sentándose en el asiento del Presidente de la Cámara, Nancy Pelosi del lado Representante y el Vice-Presidente Mike Pence del lado del Senado.

Las acciones del miércoles marcan un nuevo nivel de amenaza por los partidarios de Trump que se han visto inspirados por la retórica anti-democrática del Presidente.

Jamás en la historia de los Estados Unidos se había visto un grupo violento entrar en el Congreso con el fin de afectar los resultados de unas elecciones válidas. Algo que ni siquiera logró el ejército secesionista durante la Guerra Civil.

Queda por determinar si el millar de personas presentes en la Capital hoy día son verdaderamente representativas del colectivo completo pro-Trump, que se ha mostrado decidido en creer las mentiras del magnate a toda costa.

Dicha ideología, sin duda quedará presente en la sociedad estadounidense y si los números de apoyo cifrados en millones son creíbles, el problema no tendrá fecha de caducidad.

Ambos cuerpos legislativos en el Congreso reafirmaron su compromiso con la verdad y la Constitución y declararon casí con unanimidad afirmar los resultados electorales pro-Biden.

Sin embargo, Senadores como Joshua Hawley se han mantenido en sacrificar su integridad para defender las mentiras de Trump.

El Congreso contempla las repercusiones sobre este histórico día y rumores de la posibilidad en invocar la vigesimoquinta enmienda están siendo contempados. La Enmienda 25 declararía a Trump como incompetente en ejercer sus funciones y sería despedido de su cargo. En 231 años de historia han habido varios momentos en que se ha contemplado la sucesión por invocación de la Enmienda 25, pero nunca ha sido ejercido.

Quedan 14 días hasta la fecha de inauguración del Presidente Electo Biden. En vista de los ocurrido hoy día, podremos esperar un par de semanas de tensión en Washington.