FDA aprobó la aplicación de emergencia de la vacuna de Pfizer contra el coronavirus
Este viernes se confirmó la aprobación de emergencia de la vacuna contra el coronavirus de las farmacéuticas Pfizer y BioNTech. El permiso fue otorgado por la Administración de Medicamentos y Alimentos de Estados Unidos (FDA), por lo que se espera que la inoculación comience en los próximos días.
Según el secretario de Salud estadounidense, Alex Azar, es posible que la población comience a recibir la vacuna contra la covid-19 a partir del lunes o martes de la próxima semana.
“Vamos a trabajar con Pfizer para la distribución y podríamos tener personas vacunándose el lunes o martes de la próxima semana”, declaró para la cadena ABC.
Por su parte, el general Gustave Perna, quien tiene a su cargo toda la logística de la distribución de la vacuna, ofreció una rueda de prensa telefónica en la que deben pasar 21 días desde la primera dosis para facilitar la segunda.
Como se recuerda, la fórmula de Pfizer y BioNTech se debe aplicar en dos tandas y tiene una eficacia del 95%.
Un día antes de la aprobación por parte de la FDA, un grupo de expertos independientes había declarado que la medida era de suma urgencia, debido a la elevada crisis sanitaria que ha provocado el coronavirus en Estados Unidos, que recientemente alcanzó un nuevo récord de 3,000 muertes diarias relacionadas con la enfermedad.
Asimismo, medios internacionales señalaron que la Casa Blanca había presionado al jefe de la FDA, Stephen Hahn, para que autorice la vacuna lo más pronto posible, y que de lo contrario presente su renuncia al cargo. Se estima que esta orden fue clave para que la FDA haya aprobado la inoculación de Pfizer antes de lo previsto.
Con este hito, Estados Unidos se convierte en el quinto país del mundo en autorizar una vacuna contra la covid-19, sumándose al Reino Unido, Baréin, Canadá, Arabia Saudita y México.
Las dosis serán entregadas directamente a los hospitales y a las farmacias. Tal como se anunció, se dará prioridad a los grupos de riesgo, entre los que figuran los pacientes de los geriátricos, sus cuidadores y los profesionales del sector salud.
Según los Centros para el Control y Prevención de Enfermedades de Estados Unidos (CDC), hay cerca de 21 millones de personas que trabajan como personal médico y unos 100 millones de adultos con antecedentes médicos de alto riesgo.
