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México halla el recipiente con material radiactivo robado, que habría sido manipulado

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LA EXPOSICIÓN A SU RADIACIÓN PUEDE PROVOCAR LA MUERTE

La Policía mexicana ha anunciado el hallazgo de uno de los recipientes que contenía material radiactivo y que fue robado este martes de un camión en el estado de México. Asimismo, han advertido de que podría haber sido manipulado, lo que supondría una exposición a «niveles peligrosos de radiación» para los propios delincuentes.

   La zona ha sido acordonada por el Ejército y personal de la Secretaría de Gobernación –tal y como añaden los diarios locales–, ya que una exposición a este material «podría provocar incluso la muerte», según ha advertido a una televisión local uno de los miembros de la Comisión Nacional de Seguridad Nuclear del país (CNSNS).

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En cualquier caso, ha detallado Aclaró que el material no puede dispersarse en el ambiente y dañar a la población porque es sólido y afecta a quien lo manipula directamente. «Los ladrones habrían resultado afectados por la radiación y seguramente deberán acudir a hospitales o podrían morir», ha apostillado.

El camión transportaba un equipo de teleterapia que había sido desechado por uno de los servicios de salud estatales y en cuyo cabezal contenía cobalto-60, un material radiactivo que tiene usos médicos e industriales.

Las investigaciones apuntan a que el plan consistía en devolver el material radiactivo a un recipiente cerrado tan pronto como fuese posible, ha añadido el funcionario. La fuente radiactiva fue abandonada por los ladrones cerca del campo, a un kilómetro del lugar donde se halló el camión.

«Ya se localizó (el cobalto-60), tenemos personal allá (…) Se estableció un cerco alrededor de la fuente, nadie se puede acercar y ahora es cuando empezaremos a planear la forma más adecuada para trasladar de una forma segura esa fuente radiactiva», ha señalado a Reuters el director de Supervisión Operativa de la Comisión, Mardonio Jiménez.

El robo ha desatado temores de que el material pueda ser utilizado en una «bomba sucia». En una cumbre de seguridad nuclear en 2012, el director general de la Agencia Internacional de la Energía Atómica (AIEA), Yukiya Amano, citó precisamente a este material (cobalto-60) entre las fuentes radiactivas que podrían ser utilizados para este tipo de bombas.

«Una bomba sucia detonada en una ciudad importante podría causar un pánico masivo, así como graves consecuencias económicas y ambientales», afirmó Amano, según una copia de su discurso.

Tras tener todos los detalles a su disposición, el Gobierno de Enrique Peña Nieto ha informado del robo a la AIEA que «ofreció sus buenos oficios para ofrecer asistencia», de ser solicitada por las autoridades mexicanas.

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