Policía advierte que radicales estarían planeando “volar” el Capitolio durante discurso de Biden
La Policía del Capitolio advirtió este lunes que los grupos radicales involucrados en los ataques del pasado 6 de enero estarían organizando un ataque contra la sede del Congreso, con el objetivo de “volar” el edificio. El supuesto atentado estaría siendo planeado en torno al próximo discurso que ofrecerá Joe Biden en el lugar.
Según la jefa en funciones de la Policía del Capitolio, Yogananda Pittman, están circulando amenazas que apuntaban directamente al primer discurso formal del presidente en una sesión conjunta del Congreso. Este evento todavía no tiene una fecha definida.
“Sabemos que los miembros de los grupos de la milicia que estuvieron presentes el 6 de enero han manifestado su deseo de hacer volar el Capitolio y matar a tantos miembros como sea posible”, dijo Pittman en un testimonio ante un subcomité de la Cámara.
La advertencia de la autoridad policial se hizo en el contexto de su iniciativa por mantener las medidas de seguridad excepcionales adoptadas tras el asalto del pasado 6 de enero, que dejó un total de cinco personas fallecidas, entre ellas un agente policial.
Desde aquel acontecimiento, una zona extensa alrededor del Capitolio se mantiene rodeada por una valla de 7 pies no escalable. Además, miles de miembros de la Guardia Nacional continúan desplegados para garantizar la seguridad de la sede parlamentaria.
“Basándonos en esa información, creemos que es prudente que la Policía del Capitolio mantenga su postura de seguridad mejorada y sólida hasta que abordemos esas vulnerabilidades en el futuro”, señaló.
Los disturbios en el Capitolio ocurridos en enero tuvieron la participación de varias milicias y grupos extremistas. El asalto se realizó luego de una manifestación incendiaria de Donald Trump en la que aseguró que Joe Biden ganó las elecciones de noviembre gracias a un fraude en su contra.
Precisamente, esta semana iniciará una serie de audiencias en el Congreso para investigar las drásticas fallas de seguridad que dieron lugar a la violación del complejo del Capitolio. En su testimonio, Pittman indica que cerca de 800 alborotadores lograron ingresar al edificio, y la cantidad de presentes en aquella jornada fue de 10,000 personas.
Pittman asumió el liderazgo de la fuerza policial del Capitolio luego de que el entonces jefe, Steven Sund, renunciara días después de la catástrofe. En su testimonio al Congreso, dijo que los manifestantes “vinieron preparados para la guerra”.
Mientras tanto, el FBI y otras agencias se encuentran siguiendo de cerca las coordinaciones de grupos de extrema derecha para recibir alertas tempranas sobre posibles ataques en Washington y otras ciudades.
