Fiscalía boliviana sospecha que Sendero Luminoso perpetró el ataque en Apolo
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La Fiscalía boliviana sospecha que el grupo armado peruano Sendero Luminoso fue el autor del ataque perpetrado hace una semana en la localidad fronteriza de Apolo, en el departamento de La Paz, en el que fallecieron tres policías y un médico bolivianos, según el fiscal encargado del caso, Leopoldo Ramos.
«Por la forma de ejecución, para el Ministerio Público es probable que quienes victimaron en (la comunidad de) Miraflores fueran personas entrenadas por Sendero Luminoso, porque esa gente nunca hace disparos en el brazo o el pecho, simplemente en la cabeza», ha argumentado Ramos, que ha sugerido que también iban encapuchados.
El fiscal ha advertido sobre la posibilidad de que Sendero Luminoso se haya reactivado en los territorios que se extienden a lo largo de los más de 1.000 kilómetros de frontera común entre Perú y Bolivia.
Ramos teme que la presencia de la guerrilla peruana se haya reforzado, además, con la connivencia de los grupos narcotraficantes bolivianos que operan en la zona fronteriza, en los Andes y en la Amazonia, según ha informado la agencia estatal de noticias, ABI.
SOSPECHOSOS ENCARCELADOS
El juez instructor mixto de Apolo, Daniel Guarachi, ha ordenado la encarcelación de ocho sospechosos de perpetrar el ataque, mientras que el Gobierno de Evo Morales ha reanudado la campaña contra el cultivo de la coca destinado al narcotráfico.
Uno de los detenidos, identificado como Juan Bascopé expresó, habría admitido supuestamente la autoría del ataque y se le ha vinculado con los grupos de resistencia contra la campaña para erradicar el cultivo ilegal de coca en la zona, según una emisora de radio boliviana.
Los uniformados fueron atacados desde una serranía por presuntos defensores de las plantaciones de coca ilegal que iban a eliminar. Entonces, ocho personas fueron detenidas por las fuerzas del orden tras el ataque.
BOLIVIA, TERCER PRODUCTOR DE COCA DEL MUNDO
El cultivo de coca en Bolivia, tercer productor por detrás de Colombia y Perú, se redujo en 2012 cerca de un siete por ciento, a alrededor de 25.300 hectáreas, tras otro descenso en 2011 del doce por ciento. Del mismo modo, el precio de la hoja de coca, que puede ser utilizada para la elaboración de cocaína, también ha sufrido una bajada del cinco por ciento, según un informe de Naciones Unidas.
Bolivia es un país con tradición en el cultivo de la hoja de coca y su consumo, tanto que su presidente fue agricultor y siempre ha defendido sus beneficiosas propiedades.
Durante siglos, los bolivianos han masticado la hoja para combatir el hambre y el mal de altura y aunque su cultivo no es ilegal en el país andino, el Gobierno tiene como objetivo erradicar los excedentes que podrían ser desviados hacia los mercados ilícitos.
