Al menos 67 personas de distintas nacionalidades fallecieron luego de que un avión de la aerolínea Yeti Airlines se estrellara este domingo en Nepal. Según reportes, se trata del accidente aéreo más grave en ese país de las últimas tres décadas.
Según funcionarios de la policía, se rescataron 31 cadáveres, mientras que otros 36 cuerpos fueron hallados en el barranco donde el avión se estrelló.
“El aparato se estrelló en un barranco, así que es difícil sacar los cuerpos. La operación de búsqueda y rescate continúa. De momento no se han encontrado supervivientes”, aseguró a AFP un portavoz del ejército identificado como Krishna Prasad Bhandari.
El accidente ocurrió alrededor de las 11:00 am hora local (05:15 GMT) cerca de Pokhara. El vuelo procedente de Katmandú trasladaba a un total de 72 personas, incluyendo a cuatro tripulantes. En los operativos de rescate participaban cientos de soldados nepaleses, pero las actividades se suspendieron hasta el lunes debido a la oscuridad.
Imágenes de la televisión local mostraban esta mañana varios fragmentos de la aeronave carbonizados.
Algunos informes extraoficiales dieron cuenta de que hubo algunos sobrevivientes del accidente, quienes resultaron gravemente heridos. Sin embargo, todavía no se han confirmado estas versiones.
La tragedia motivó que el primer ministro de Nepal declarara día de luto nacional el lunes. Además, las autoridades conformaron un comité que se encargará de investigar las causas del accidente.
Del total de pasajeros, 53 eran de nacionalidad nepalí. Además, se confirmó que había cinco indios, cuatro rusos, un irlandés, un australiano, un argentino, un francés, entre otros.
El fuselaje incendiado del aparato se encontraba en un profundo barranco entre el antiguo aeropuerto de Pokhara, creado en 1958, y el nuevo terminal internacional de esta ciudad, inaugurado el pasado 1 de enero.
Tras el accidente, los rescatistas trataron de sofocar el fuego entre los restos del aparato, un ATR 72 propulsado por dos motores turbohélice, constataron periodistas de AFP.
La industria aeronáutica de Nepal creció mucho en los últimos años, tanto en el transporte de mercancías como de turistas.
Sin embargo, debido a la falta de formación del personal y problemas de mantenimiento, las compañías sufren a menudo de problemas de seguridad. La Unión Europea prohibió por ello a todos los transportistas nepaleses entrar en su espacio aéreo.
El país del Himalaya también cuenta con algunas de las pistas más remotas y complicadas del mundo, flanqueadas por picos nevados que hacen que acercarse a ellas sea un reto incluso para los pilotos experimentados.
