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Republicano George Santos es acusado de fraude, lavado de dinero y más delitos

El polémico representante republicano George Santos (Nueva York) enfrenta acusaciones de fraude, lavado de dinero, robo de fondos públicos y otros delitos, según una acusación fiscal revelada este miércoles.

El escrutinio del congresista comenzó luego de que se descubriera que mintió en varios pasajes de su hoja de vida. Santos aseguró que había trabajado para los bancos Citigroup y Goldman Sachs, lo que resultó ser falso. Tampoco se hallaron pruebas de sus supuestos negocios inmobiliarios ni su paso por la universidad.

El hombre de 34 años fue arrestado la mañana del miércoles, según informó el Departamento de Justicia. En la lectura de cargos ante el tribunal federal de Central Islip se declaró inocente, y fue liberado bajo una fianza de US$ 500,000 y la posterior entrega de su pasaporte.

El fiscal federal Breon Peace señaló que Santos se valió de engaños y prácticas deshonestas para “ascender a los pasillos del Congreso y enriquecerse”.

Y agregó: “Usó contribuciones políticas para llenarse los bolsillos, solicitó ilegalmente beneficios de desempleo que deberían haber ido a los neoyorquinos que habían perdido sus trabajos debido a la pandemia y mintió a la Cámara de Representantes.

La acusación forma contra Santos incluye 13 cargos. Siete de ellos son de fraude electrónico, otros tres de lavado de dinero, dos por hacer declaraciones materialmente falsas a la Cámara de Representantes y uno por robo de fondos públicos.

Si es declarado culpable, el congresista novato enfrenta hasta 20 años de prisión, vinculados a los cargos más graves.

A su salida del juzgado, Santos fue abordado por varios medios locales y aseguró que es su derecho lucha por probar su inocencia. También reiteró que no tiene pensado renunciar a su cargo.

“Probaré mi inocencia y luego avanzaremos desde allí. La reelección está muy lejos. No renunciaré”, declaró.

Santos apuntó hacia el Departamento de Justicia, asegurando que está montando una “cacería de brujas” en su contra.

“Voy a pelear mi batalla. Voy a cumplir. Voy a pelear la cacería de brujas, me voy a encargar de limpiar mi nombre y espero hacerlo”, agregó.

La acusación de 20 páginas expone un presunto esquema en el que Santos operaba una sociedad de responsabilidad limitada para defraudar a los posibles partidarios de su campaña para el Congreso en el 2022.

Los fiscales federales creen que Santos indujo a sus simpatizantes a donar dinero a la empresa anónima, haciéndoles creer que esos fondos se utilizarían para apoyar su candidatura.

Sin embargo, Santos habría gastado gran parte de las donaciones en gastos personales, incluyendo ropa de diseñador de lujo, pagos de tarjetas de crédito, automóviles y pagos de deudas personales.

“Santos convirtió la mayor parte de esos fondos para su beneficio personal”, señalaron los fiscales.

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