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«El Caso Aristegui» por Rosario Del Pilar Salazar Silveira

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Dice Elena Poniatowska, la multipremiada escritora mexicana:

A escasas dos semanas de la fuga de El Chapo, el narcotraficante más buscado después del colombiano Pablo Escobar, una resolución del quinto tribunal colegiado en materia penal y de justicia mexicano niega a Carmen Aristegui y a su equipo el amparo promovido contra MVS-Radio, empresa que los despidió el pasado 15 de marzo.…esta lamentable decisión demuestra que el Poder Judicial está sometido al poder presidencial. Junto a la politóloga y maestra Denise Dresser (cuya solidaridad con la conductora es admirable en el país del sálvese quien pueda) los tres promueven otro amparo porque consideran que la censura a Aristegui viola la libertad de expresión de los mexicanos.

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Carmen Aristegui: reconocida periodista mexicana. Habría sido despedida de MVS-Radio por investigación sobre propiedades del presidente Peña Nieto y de su esposa.

 

Hoy tenemos con nosotros a una personalidad tanto de la política de México, como del hacer poético. Se trata de Rosario Del Pilar Salazar Silveira, luchadora  desde 2006 en el partido de la Revolución Democrática. Originaria de Mérida, Yucatán, en mayo de 2015, quedó como  candidata  a una diputación por parte del Movimiento de Regeneración Nacional (Morena)

Hoy, Rosario, acerca a Diario―Digital su visión acerca del despido de Carmen Aristegui de MVS―Radio, lo que es considerado por muchos, uno de los tantos atentados contra la libertad de prensa por parte del gobierno de Peña Nieto.También, según abundantes opiniones, es una de las tantas señales de que en México no hay Estado de Derecho.

 

 El Caso Aristegui

Carmen Aristegui es considerada  una de las mejores  periodistas de México. Comunicadora veraz, justa, con un verdadero equilibro en sus razones. Se sabe de ella que nunca tomó partido y siempre ha procurado buscar la verdad. Su noticiero ha sido el que más audiencia ha tenido en el país.

Quienes la seguimos reprochamos su despido injustificado de MVS, una expulsión alevosa,  un verdadero atentado a la libertad de expresión. Lo ocurrido está relacionado con “La Casa Blanca”, residencia presidencial de Peña Nieto: con un costo de 7 millones de dólares,  fue construida por el Grupo HIGA, quien ganó la licitación del tren México-Querétaro y muchas otras construcciones en el tiempo en el que el actual presidente fuera gobernador del Estado de México. La investigación de la famosa casa presidencial hecha por parte de los periodistas que forman el equipo de Aristegui,  (a quienes ella defendió cuando tuvieron dificultades para  realizar su trabajo) , fue tomado como pretexto para el cese de la comunicadora y colaboradores. MVS negó que esa fuera la razón del despido y su argumento fue  que ella  sin tener autorización al grupo de medios MVS lo unió al proyecto Mexicoleaks  formado por varios medios de comunicación con la finalidad de recibir supuestos casos de corrupción.

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Rosario Del Pilar Salazar Silveira, autora del artículo. Luchadora política y poeta destacada

 

Todo comenzó con un reportaje hecho a la esposa de Peña Nieto por la revista “Hola” mostrando en la intimidad a la familia presidencial y en donde Angélica Rivera dijo “En nuestra casa llevamos una vida lo más normal posible, Los Pinos nos será prestado por seis años” Agregó  que su verdadera casa, su hogar, es “donde hemos hecho este reportaje” . El texto se acompañaba con fotografías de la lujosa residencia ubicada en las Lomas de Chapultepec, uno de los sectores con más plusvalía de la capital del país.

La decisión de la empresa MVS de cesar a Aristegui, fue un detonante para que el país se vuelque en apoyo   de la periodista y de su equipo. La investigación  hecha, con bases sustentables, con veracidad,  deja ver claramente,  la falsedad y el autoritarismo del gobierno priista. El caso Aristegui llevado a lo penal, nos deja deducir que las viejas prácticas siguen siendo las mismas: neoliberalismo llevado a su máxima potencia, antidemocracia y  la poca confiabilidad de las leyes mexicanas.

Es vergonzoso que en pleno siglo XXI el gobierno de México continúe reprimiendo a periodistas de la forma en que lo hace,  atentando vulgarmente contra la libertad de expresión de todos aquellos comunicadores,  que al procurar ser éticos y confiables les tapan la boca, los despiden o simplemente los asesinan.

 

Rosario Del Pilar Salazar Silveira

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