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Río de Janeiro (DIARIO) • Un narcotraficante brasileño, condenado a pena de muerte por tráfico de drogas en Indonesia ha sido ejecutado por las autoridades de ese país el sábado por la tarde (Domingo en Jakarta) junto a otros cinco reos.
Marco Archer Cardoso Moreira de 53 años de edad trabajaba como instructor de vuelo libre y fue arrestado en agosto del 2003 cuando intento entrar al aeropuerto de Yakarta con 13.4 kilos de cocaína ocultos en un ala delta.
El portavoz del gobierno de Indonesia ha confirmado la muerte del Archer de acuerdo con la leyes del país surasiático, la única manera de revertir una sentencia de muerte es que el mismo presidente del país acepte una petición de clemencia. Situación que no se ocurrió en este caso a pesar de varias peticiones del gobierno brasileño del entonces presidente Lula da Silva y la actual Presidente Dilma Rousseff.
En una de sus últimas grabaciones, Archer indicó que soñaba con regresar a Brasil y que trabajaría para educar a otros sobre su error, «Estoy sufriendo. Sé que me equivoqué… pero todo el mundo comete errores», dijo el brasileño.
La pena de muerte es ejecutada por fusilamiento en Indonesia.
