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Los cárteles mexicanos invaden Centroamérica

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Ciudad de México, México (NM) –    México ha estado siempre sometido a los cárteles de la droga y esto ha supuesto el principal desafío de seguridad ya que como consecuencia los índices de violencia han aumentado. Debido al desplazamiento de narcotraficantes, estos carteles se han extendido a todo Centroamérica de una manera imparable.

Pesos mexicanos, narcotráfico

El problema del narcotráfico se ha agudizado en los últimos años, cuando las organizaciones consolidaron su presencia en la región debido al desplazamiento de los grupos locales mexicanos hacia otras zonas iberoamericanas.

Aunque México sigue siendo el principal país con una de las rutas del narcotráfico más importantes del mundo con cárteles como el de Caballeros Templarios, el del Golfo o los Zetas se disputan el territorio con otros grupos locales en su empeño de hacer llegar la droga a su vecino del norte, Estados Unidos. Actualmente, por Centroamérica pasa el 80 por ciento de la cocaína que llega al Norteamérica, según el Departamento de Estado de Estados Unidos.

Esta disputa del mercado de la droga, es una consecuencia del movimiento de los cárteles hacia otras regiones que ha provocado el incremento de la violencia en países como Costa Rica o Panamá, donde han aumentado sus índices de criminalidad

«Hemos notado, con mayor preocupación que el año pasado se estimaba que por la región iban a pasar entre 1.300 y 1.400 toneladas de cocaína», señaló el ministro de Seguridad Pública y de Gobernación de Costa Rica, Luis Gustavo Mata a ‘BBC Mundo’. Además, puntualizó que hasta hace unos años las estimaciones solo eran de 300 toneladas por año.

En el caso de Colombia, la invasión de cárteles mexicanos es tal, que «prácticamente han desplazado a las organizaciones de Colombia», según Mata, a lo que añadió que eran los colombianos «quienes se encargaban de manipular todo el trasiego de la droga, principalmente cocaína».

Desde el año 2008, las organizaciones mexicanas contratan a grupos locales para custodiar y trasladar la droga, principalmente por el Océano Pacífico. El resto de estupefacientes se transporta en contenedores especiales dentro de camiones de carga o autobuses de pasajeros.

En Guatemala, el cartel de Sinaloa controla la zona norte y del Pacífico, así como en los departamentos de Escuintla, Suchitepéquez, Izabal, Zacapa y Petén, en la frontera con México. También, Honduras detectó representantes de la misma organización en el balneario Islas de la Bahía, en el Mar Caribe y en San Pedro Sula. Esta última ciudad, está considerada como la más peligrosa del mundo por cuarto año consecutivo, según el informe que anualmente publica la ONG mexicana ‘Seguridad, Justicia y Paz’. En San Pedro Sula se producen 171,20 homicidios por cada 100.000 habitantes.

Es así, que Sinaloa es la principal organización en crecimiento, incluso después de la captura de uno de sus fundadores, Joaquín Guzmán Loera, conocido como ‘El Chapo’. De hecho, «el encarcelamiento del capo no cambió la expansión del cartel», según el ministro de Gobernación de Guatemala, Francisco Rivas.

Generalmente, la caída de líderes crea cárteles ‘descabezados’ y agudiza el movimiento por territorios a través de células delictivas, donde operan como brazos armados. Es así, que al caer el cabezilla, la organización tiende a dividirse y esto atomiza la lucha contra el crimen organizado al tener líderes menos visibles.

Este dominio de Sinaloa se debe a que desde hace años, la organización aprovechó la persecución que sostienen las autoridades contra los grupos locales guatemaltecos. Además, otro de los factores principales fue la extraditación a Estados Unidos de algunos líderes del cartel de la Familia Lorenzana, una de las más antiguas del negocio del tráfico de drogas en Guatemala.

COSTA RICA, FOCO DEL NARCOTRÁFICO   

Costa Rica tiene los mejores índices económicos y sociales de Centroamérica, pero actualmente se enfrenta al problema del narcótrafico, que está entrando con fuerza en su territorio.

Costa Rica fue ruta del tránsito de 1.200 toneladas de cocaína en el año 2015, de las cuales las autoridades solos lograron confiscar 15, según señala el diario costarricense ‘La Nación’. De esta cantidad de droga, el 98 por ciento pertenecieron a cárteles mexicanos estrechamente vinculados con las bandas del país.

Debido al despunte del narcotráfico en la región, la cifra de homicidios ha aumentado en los últimos años, tras media década con una tasa inferior a 10 por cada 10.000 habitantes. En el año 2013 se registraron 411 homicidios y en 2014 un total de 477.

VIOLENCIA Y PREOCUPACIÓN   

Según el Informe Mundial Sobre las Drogas del 2015, elaborado por Naciones Unidas, la cocaína sigue siendo la droga que mayor preocupación suscita en América Latina y el Caribe, donde se da uno de los principales mercados del mundo.

Este mercado, además, es un sinónimo de crímenes, asesinatos y secuestros. Solo en México, 60.000 personas perdieron la vida entre 2006 y 2012 por el negocio de la droga según Human Rights Watch. Por el mismo motivo, 26.121 personas desaparecieron en el mismo periodo.

El negocio del narcotráfico también conlleva el tráfico de armas. Al respecto, según la ‘CNN’, «el 70 por ciento de las pistolas recuperadas de actividades criminales en México desde 2007 hasta 2011» y rastreadas por el Gobierno de Estados Unidos, se originaron a partir de venta de droga.

«La presencia de carteles ha variado las condiciones en que se comente el crimen», afirmó el ministro Rivas, quien agregó que su país (Guatemala), «es víctima de la secuela de muertes debido a trasiego de drogas».

 

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