Internacional

¿Qué estrategias puede usar Maduro para gobernar sin la Asamblea Nacional?

This content has been archived. It may no longer be relevant

Caracas, Venezuela (Notimérica) -El presidente de Venezuela, Nicolás Maduro, vio disminuido su poder el pasado 6 diciembre, cuando la oposición ganó las elecciones parlamentarias y se hizo con dos tercios de la Asamblea Nacional (el Parlamento).

La noticia es a todas luces un verdadero problema para el Gobierno venezolano, que con una Asamblea en su contra, verá difícil en 2016 cumplir con sus objetivos políticos. Sin embargo, en la polarizada Venezuela, Maduro tiene a mano algunos instrumentos y podría idear estrategias para limitar o anular el poder de la oposición.

Para empezar, la Asamblea aprobó el pasado mes de marzo la Ley Habilitante, que permite a Maduro legislar por decreto ante las amenaza que el Gobierno considera que supone Estados Unidos para la estabilidad económica y política de Venezuela y que faculta a Maduro a redactar y sancionar leyes sin el concurso previo ni posterior de los diputados.

Esta ley sólo rige hasta el 31 de diciembre de 2015, pero existe la posibilidad de que la Asamblea –la nueva asume el 5 de enero– emita ahora una prórroga de seis o 12 meses de la actual Ley Habilitante, algo que sería legal aunque controvertido. La actual mayoría ‘chavista’ en la Asamblea también podría aprobar nuevos poderes para el presidente venezolano, algo que podría considerarse ilegal.

Por otro lado, la Constitución contempla que el presidente pueda disolver la Asamblea si esa aprueba tres veces en el mismo periodo la remoción del vicepresidente. Sin embargo, este movimiento traería probablemente graves consecuencias políticas.

Sin embargo, si Maduro decide disolver la Asamblea o si prorroga la Ley Habilitante, el conflicto entre el Ejecutivo y el Legislativo acabará pasando por el Tribunal Supremo de Justicia (TSJ), un poder que se erigirá como clave en los próximos días.

El presidente tiene la capacidad de retrasar todas las leyes que se aprueban en la Asamblea y que tienen que pasar por él para ser promulgadas, o puede declararlas inconstitucionales para que sea el TSJ el que decida.

El pasado 8 de diciembre, el actual presidente de la Asamblea Nacional, Diosdado Cabello, advirtió que la Asamblea saliente nombraría a magistrados para cubrir vacantes existentes en el TSJ, que cuenta con 32 miembros, antes del 5 de enero de 2016, cuando asumen los nuevos legisladores electos.

La Asamblea Nacional debe ahora designar a 18 magistrados permanentes en el Tribunal Supremo, incluidas las 13 vacantes creadas por magistrados que pidieron su jubilación en octubre de 2015, aparentemente un año antes de que concluyera su mandato.

Según ha advertido Human Rights Watch (HRW), «la importancia clave de la independencia judicial y su trascendencia para el estado de derecho y los Derechos Humanos no puede ser subestimada, y la comunidad internacional debe desempeñar un papel fundamental para asegurar que exista un poder judicial independiente en Venezuela».

 

Publicaciones relacionadas

Botón volver arriba