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Madrid, España (EP) • Este octubre el mundo entero se sorprendía al darse cuenta de que habíamos llegado al famoso año en el que Marty McFly, encarnado por Michael J. Fox en ‘Regreso al futuro’, viajaba hasta el aparentemente lejano 2015, en el que las personas se trasladaban de un lugar a otro en aeropatín, hablaban a través de videollamadas y vestían ropa inteligente con conexión a Internet.
Aunque algunas de estas predicciones no se han cumplido, otras como la ropa inteligente ya son una realidad.
En este sentido, el estudio Shift 2015 de Mindshare, recogido por el blog de Telefónica ‘Think Big’, pronostica que la penetración de las prendas inteligentes crecerá hasta un 16 por ciento durante el próximo año.
¿Significa esto que ha llegado el momento de hacerle un hueco a la tecnología en nuestros armarios? Hasta las predicciones más pesimistas admiten que la introducción de las prendas inteligentes en nuestro día a día es cuestión de tiempo.
Las prendas y accesorios inteligentes están diseñados para cubrir algunas necesidades fundamentales de los usuarios, cómo abrir el coche a distancia gracias a un guante o informarnos de la calidad de nuestro sueño con la ayuda de una pulsera o un pijama.
PRENDAS INTELIGENTES DEPORTIVAS, LAS MÁS DEMANDADAS
Por el momento, el deporte es el ámbito en el que mejor se están incorporando estas novedades. En parte, también, porque es el más demandado.
De hecho, el estudio ha determinado que una de las principales funciones que buscan los usuarios en una prenda inteligente es que monitorice su ejercicio y dieta para sugerir mejoras. Otra de las funciones principales es la utilización de la tecnología como arma contra el cambio climático.
En este sentido, Alexander Kostin, semifinalista en el Electrolux Design Lab Competition, ha creado una pulsera que emite un gas purificador, a través de un filtro de carbón recargable. Así, el que la lleve quedará protegido de todo ese aire contaminado que respiramos normalmente.
Por su parte, la empresa estadounidense Adafruit, ha creado un casco de ciclista que incorpora un sistema de navegación integrado. ¿Su objetivo? Guiar al conductor hasta la estación de bici más cercana mediante unas luces instaladas a la izquierda y a la derecha del propio casco.
Asimismo, las cadenas de producción también pueden beneficiarse de las prendas inteligentes. Esto es posible gracias a ProGlobe, un proyecto nacido en Alemania y que ha elaborado unos guantes que son capaces de monitorizar con precisión todas las actividades que realicemos, reconociendo en tiempo real la temperatura, voltaje, piezas o accesorios del objeto que manipulen.
PROBADORES INTELIGENTES
Además, no debemos olvidarnos de que el gigante textil Inditex ya ha decidido dar el salto a la tecnología de la moda. Aunque el grupo multinacional aún no ha diseñado ninguna chaqueta con conexión a Internet, acaba de instalar en una de sus tiendas probadores inteligentes para facilitar la experiencia de la compra al cliente.
Estos probadores funcionan del siguiente modo. Antes de que el cliente entre en ellos, sus prendas son escaneadas y aparecen automáticamente en una pantalla táctil instalada en el probador. Una vez dentro, la persona puede señalar si quiere cambiar el color o la talla de la prenda o incluso pedir un artículo nuevo, sin necesidad de vestirse y salir del probador.
¿Es esto el principio del fin de la moda tal y como la hemos conocido hasta ahora? Por el momento, tendremos que conformarnos con ver los avances en los laboratorios y esperar a que lleguen a las tiendas.
