Internacional

Puerto Rico divisa un futuro incierto tras incumplir el pago de su deuda

This content has been archived. It may no longer be relevant

La incertidumbre prevalece hoy en Puerto Rico, después que el estado libre asociado a Estados Unidos hubiera incumplido por primera vez el pago de su deuda, estimada en 72.000 millones de dólares, evidenciando que la situación financiera de la isla ha empeorado.

San Juan Puerto Rico - Foto: Facebook
Puerto Rico en la incertidumbre tras incumplir el pago de su deuda

   La falta de liquidez puertorriqueña se hizo evidente después de que pagara sólo 628.000 dólares de los 58 millones de dólares que debía abonar ayer lunes a los acreedores de la Corporación para el Financiamiento Público.

La situación ya había sido advertida por el gobernador de Puerto Rico, Alberto García Padilla, quien en junio pasado indicó que la deuda era «impagable» y pidió a su equipo preparar un plan de reestructuración de la deuda.

Incluso el jefe del equipo de García Padilla, Víctor Suárez, adelantó la semana pasada que haría un esfuerzo para reunir liquidez y saldar los vencimientos de deuda más inmediatos de agosto.

Después de esas declaraciones, el impago no ha sido una sorpresa, pero las consecuencias que tendrá aún son inciertas, suscitando la preocupación y el temor entre los 3,6 millones de puertorriqueños de que Puerto Rico llegue a un incumplimiento total.

La presidenta del Banco gubernamental de Desarrollo, Melba Acosta Febo, ha afirmado que la falta de liquidez afecta a las obligaciones con los acreedores y con el pueblo de Puerto Rico, «igualmente importantes para garantizar que se mantengan los servicios esenciales». Asimismo, ha explicado que el pago no pudo hacerse debido a la falta de fondos asignados para el año fiscal en curso.

La economía de Puerto Rico está en «espiral de muerte», según palabras de García Padilla, ya que tiene una tasa de desempleo de 12 por ciento, más del doble de la media de Estados Unidos, de un 5,3 por ciento, y una deuda per cápita mucho mayor que cualquier otro estado americano.

La administración de la isla caribeña ha tenido problemas con las recaudaciones y exenciones fiscales, por lo que ha realizado un llamamiento para recibir inversiones en Puerto Rico, que ya ha sido apodado como «la Grecia de América».

La crisis financiera de Puerto Rico puede resultar la prueba más grande hasta la fecha en el mercado de bonos gubernamentales, en el cual los titulares ya han pedido reducciones en los gastos de educación y de otras áreas para que el estado cumpla con sus obligaciones.

García Padilla viajó a Washington para recabar apoyo entre los legisladores del Congreso para que Puerto Rico pueda acogerse a la ley federal de quiebras que rige en Estados Unidos, y al menos el secretario del Tesoro, Jacob Lew, se mostró a favor de ello.

Por ahora, el Gobierno boricua centra sus esfuerzos en la elaboración del Plan de Ajuste Fiscal y Económico a Largo Plazo para continuar este mismo mes con la renegociación de la deuda con los acreedores, sostuvo Suárez en rueda de prensa.

El funcionario afirmó que la negociación «dependerá de la disponibilidad de los distintos acreedores y se dará conforme se vaya trabajando el plan de ajuste fiscal», de acuerdo con reportes del diario ‘El Nuevo Día’.

La agencia calificadora Fitch Ratings indicó que la decisión del Gobierno de no emitir el pago de la deuda a la Corporación para el Financiamiento Público no afectará de manera inmediata la calificación del crédito local.

Sin embargo, reiteró que seguirá pendiente a los planes de reestructuración del Gobierno e irá degradando los diferentes emisores de deuda del gobierno de manera individual, según se vaya acercando al impago.

Fitch mantiene una calificación de «CC» para la deuda de las obligaciones generales y otras relacionadas del Gobierno de Puerto Rico; y una perspectiva negativa, que implica que la agencia de crédito estima que un «incumplimiento» es probable.

Publicaciones relacionadas

Botón volver arriba