This content has been archived. It may no longer be relevant
Saint Louis • La Organización Mundial de la Salud (OMS) ha elevado el viernes el brote de ébola como una «preocupación de emergencia a la salud publica internacional», tras alcanzar los 900 fallecidos por el Virus mortal en el Oeste de África.
La directora de la OMS, Dra. Margaret Chan dijo a través de un comunicado que es «una clara llamada para la solidaridad internacional», pero admitió que el riesgo es muy bajo para muchos países de vieran el virus cruzar sus fronteras.
«Los países afectados hasta el momento simplemente no disponen de la capacidad en manejar el brote del tamaño y complejidad por si solos,» dijo Chan. «Insto a la comunidad internacional en proveer el apoyo de la manera más urgente posible.» Concluyó Chan en una rueda de prensa en Ginebra, Suiza.
La OMS ha hecho declaraciones similares durante el pandémico de gripe porcina del 2009 y la de Polio en Mayo de este año.
El Centro de Control y Prevención de Enfermedades de los Estados Unidos elevó el nivel de alerta al número más alto el Miércoles y recomienda que nadie viaje al África Oriental mientras el brote de ébola esté fuera de control, como lo esta ahora.
Esta última epidemia de ébola es el más largo y extenso de la historia, matando hasta la fecha a 932 personas y ha enfermado a unos 1700 de más.
Aunque no existe ninguna vacuna contra el virus mortal, centros especializados en el estudio de este virus han desarrollado vacunas experimentales y probados en dos misioneros americanos que se encuentran actualmente en un hospital en Atlanta con lo que parecen resultados positivos.
La OMS hizo un número de recomendaciones el Viernes a aquellos países que necesitan frenar la transmisión de la enfermedad, o prevenir nuevos casos en países adyacentes a las afectadas. Actualmente el ébola se registra en Guinea, Liberia, Nigeria y Sierra Leona.
Una de las recomendaciones de la OMS es la reducción en viajar a las zonas afectadas sin limitar el libre comercio con los países afectados y que los que viajan a las naciones afectadas cuenten con toda la información necesaria para prevenir el contagio y reducir su propagación.
Además, la OMS recomienda un protocolo que facilite la evacuación y repatriación de extranjeros, principalmente los trabajadores de salud, que sean contagiados por el virus.
