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México podría sancionar con 140 años de cárcel a los secuestradores

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El Senado de México ha aprobado una reforma de la ley que penaliza los secuestros para elevar a hasta 140 años las penas de prisión para este tipo de delito, que actualmente se encuentra penado con entre 40 y 70 años de cárcel, según el diario mexicano ‘El Universal’.

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La nueva ley contempla que sean sentenciadas con 140 años de prisión las personas que hayan cometido un delito de secuestro con agravantes de asesinato, violación o mutilación a sus víctimas. Este tipo de asalto se ha incrementado durante los últimos años. En el año 2012 se registraron 1.196 denuncias por secuestro, cifra que se elevó a 1.583 casos en 2013.

El senador Omar Fayad, que preside la comisión de Seguridad Pública, ha declarado ante la Cámara que «quizás no sea la mejor respuesta disuasiva, pero el pueblo mexicano esperaba una respuesta y se ha votado en consecuencia».

La reforma, que ha sido aprobada por los 61 votos a favor del Partido Revolucionario Institucional (PRI) y del Partido de Acción Nacional (PAN), y los 22 en contra del PRD, ha sido votada dos semanas después de que el Partido de la Revolución Democrática (PRD), en la oposición, obligase a suspender la decisión al boicotear la sesión. Hecho que Fayad calificó de mala señal enviada por quienes «increíblemente» anteponen los derechos de «los delincuentes a los de las víctimas».

ENVIADA A LA CÁMARA DE DIPUTADOS

La nueva ley ha sido enviada a la Cámara de Diputados para que sea revisada antes de su aprobación. El texto recoge que la intención de la reforma es disminuir los secuestros en el país, que en 2012 pudo llegar a los 105.000 casos. La nueva ley contempla diferentes tipos de agravantes.

La sentencia será más dura si el secuestro se produce en caminos públicos o lugares poco protegidos, así como si en el asalto participan dos o más personas. También se contemplan como agravantes que la víctima sea menor de 18 años o mayor de 60, que no tenga capacidad de defenderse o que se trate de una mujer embarazada.

La pena se endurecería más en el caso de que la persona acusada trabaje o haya trabajado como miembro de las fuerzas de seguridad, Ejército o judicatura, aunque las sentencias más severas se producirán cuando la víctima tenga alguna relación personal o laboral con el secuestrador o el secuestro conlleve actos violentos, violaciones o asesinatos.

Fayad, del gobernante PRI, ha defendido que con esta reforma,«el Senado se suma al esfuerzo del Gobierno«. Además, ha añadido que el tema «ha sido evaluado» y se ha determinado que «ni es inconstitucional ni viola los Derechos Humanos».

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